Rosa
Montero hace una crítica sobre un tema social de actualidad: el abandono de
perros en las grandes ciudades. La crítica social es muy frecuente en el
articulismo español. Otras mujeres también son asiduas del género: Espido
Freire, Maruja Torres…
Dejar solo
a un perro, sin ningunas posibilidades de supervivencia, es una acto despiadado.
En la mayor parte de los casos es reflejo de carácter irresponsable y egoísta
de los dueños. Hay otros casos en los que el abandono se produce por razones
económicas. Son los dueños que se quedan sin medios para pagar la comida, las
vacunas, el veterinario. Seguramente está más justificado, pero creemos que son
posibles otras alternativas.
El perro es
un animal que desde antiguo ha sido considerado como el mejor amigo del hombre.
Expresiones referentes a l perro y a su fidelidad han penetrado en el lenguaje
común. Hace poco, decía Fernando Alonso que el que busque un amigo en la
Fórmula 1, lo mejor que puede hacer es comprarse un perro.
También hay
referencias en los clásicos, Ulises, cuando vuelve a Ítaca después de dieciocho
años, solo es reconocido por su perro y por una criada. El perro, pues, no es
un animal cualquiera. Necesita un dueño responsable, que atienda a sus cuidados
y que también le guarde lealtad.
En España
no están muy desarrolladas las leyes que protegen a los animales. Es por ello
que muchos optan por el abandono, el maltrato y hasta la muerte cuando su
mascota ya no les sigue. Es preciso, pues, una revisión y aplicación más
enérgicas de las leyes y extender el conjunto de instituciones que cuidan de
los animales: asociaciones, protectoras, guarderías para mascotas, etc.
En
definitiva, estamos necesitados, como
dice Rosa Montero de una mayor conciencia social en la defensa de los animales,
y también en leyes e instituciones que velen por sus derechos. Vivimos en una
sociedad más humana.
Joseba
Iraeta
2º
A Bach.
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